Es en circunstancias de extrema presión que las cosas demuestran de qué están hechas y cuánto resisten, sin duda en Fe y Alegría Zona Santo Domingo este ha sido un tiempo de descubrir nuestra energía vital, nuestra esencia, el espíritu que nos mueve y nos empuja al encuentro de la realidad de las otras, de los otros, en los contextos que nos han regalado la oportunidad de ser agentes de transformación en favor de la vida digna para todas/todos en y con nuestra Madre Tierra.
Desde las diferentes áreas hemos buscado tejer redes de colaboración al interno, entre los actores de la comunidad educativa y entre centros de nuestra zona, y hacia fuera con otras instituciones educativas, para sostener la vida desde nuestro quehacer educativo en el ámbito pedagógico, convivencial y profundamente humano, desde lo espiritual-psicológico-socioeconómico.